No todos los afectados del SFC presentan todos los síntomas posibles; pueden manifestarse algunos nuevos, desaparecer otros anteriores y ser fluctuantes tanto en el tiempo como en la intensidad. La severidad de la sintomatología varía de un paciente a otro. El curso del SFC es imprevisible y se alternan períodos de remisión con otros de “brotes o crisis”. Por ello, algunos casos llegan a ser invalidantes y así se declaran a efectos de la prestación contributiva de Incapacidad Permanente, aunque siempre con el criterio Jurisprudencial consistente en que, conforme hemos dicho, debe atenderse a cada caso en particular.
Síndrome de Fatiga Crónica – Institut Ferran de Reumatología.
Actualmente no se dispone de un tratamiento curativo para el Síndrome de la Fatiga Crónica. El abordaje terapéutico es complejo y obliga a la combinación de diferentes modalidades terapéuticas. El objetivo es, hoy por hoy, el alivio de los síntomas y la adaptación del enfermo a sus nuevas circunstancias. El médico, conjuntamente con el paciente, tiene que desarrollar un programa adaptado individualmente que le proporcione la máxima percepción de mejora. El enfermo tiene que aprender a valorar cuales son sus nuevos límites.
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